Washington, 16 jun (Prensa Latina) El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó hoy una orden ejecutiva para reformar la policía, en apenas un acercamiento a las exigencias de las protestas que recorren el país tras el asesinato de George Floyd.
Pasado el mediodía, Trump llegó sin portar su nasobuco al jardín de la Casa Blanca, desde donde habló a los periodistas sobre el significado de la medida antes de rubricarla frente a las cámaras.
El mandatario dijo estar «fuertemente en contra» de desmantelar los departamentos de policía y por el contrario abogó por proporcionar incentivos financieros a aquellos lugares que mejoren su formación y estándares sobre el uso de la fuerza.
Trump, muy critricado aquí por la respuesta represiva a las movilizaciones, opinó que «sin seguridad hay caos, hay anarquía», por eso pidió apoyar «a nuestros valerosos hombres y mujeres de azul».
En ese sentido acotó «debemos invertir más recursos en instrucción policial y con nuestras comunidades».
También explicó que la orden ejecutiva implica que, por ejemplo, no podrá utilizarse la práctica de llaves de estrangulamiento a menos que «la vida de un policía está en peligro», algo que resulta bastante subjetivo.
Trump ya había anticipado el jueves pasado que estaban finalizando una orden ejecutiva que alentaría a los departamentos de policía a cumplir con «estándares profesionales» para el uso de la fuerza en el cumplimiento del deber.
En ese momentro el presidente describió la orden como un estímulo a la «fuerza con compasión».
El decreto presidencial llega en momentos en que tanto demócratas como republicanos andan inmersos en sus propios proyectos legislativos para reformar las prácticas policiales a nivel nacional.